La capacidad de saturación del aire varía con la temperatura y depende sobre todo de la temperatura. Si la temperatura sube (como sucede en la compresión), lo hará también la capacidad de saturación del aire.
El valor de agua se condensará tras una refrigeración posterior. El condesado se separa en el separador centrífugo conectado a continuación o en depósito de presión. Pero el aire seguirá saturado de vapor de agua al 100%
Por eso, si el aire se sigue enfriando, continuará formándose una cantidad importante de condensado en la red de tuberías y en los puntos de consumo
Si no se lleva a cabo un secado adicional del aire comprimido será inevitable que se produzca averías e interrupciones de la producción y que haya que llevar a cabo costosos trabajos de mantenimiento y reparación.
En la mayoría de los casos, la solución más económica es un secador frigorífico. El innovador sistema SECOTEC® permite un secado del aire comprimido aún más económico
Consulte con nuestros asesores sobre los secadores frigoríficos Kaeser